sábado, 24 de marzo de 2012

24M


El constitucionalismo moderno tiene en la promulgación de un texto escrito, que contiene una declaración de los derechos del hombre y del ciudadano, uno de sus momentos nodales de desarrollo y de sus principales conquistas, que consagra las victorias del ciudadano sobre el poder”


De esta forma Nicola Matteucci comienza su explicación sobre los “derechos del hombre” en el ya conocido Diccionario de Política dirigido por el fallecido Norberto Bobbio. Desde la visión individualista, característica de la Ilustración, hemos recorrido un extenso camino en el asentamiento de los mecanismos colectivos en defensa de los Derechos Humanos: la necesidad de entender al Estado como garante activo de nuestros derechos.


Los latinoamericanos hemos sufrido en carne propia la radicación de proyectos totalitarios que a partir de los años 70 tuvieron como principal objetivo la aniquilación absoluta de cualquier proyecto político/social alternativo al poder imperial. Emancipación y soberanía eran dos pecados imperdonables para las embajadas norteamericanas que auspiciaron activamente todas las intervenciones militares. De esta forma las Fuerzas Armadas de cada nación, formadas en la Escuela de las Américas, actuaron como ejércitos de ocupación, desarrollando una supuesta “guerra interna” bajo la doctrina de la “seguridad nacional”.


Hoy estamos conmemorando un nuevo aniversario del último golpe cívico militar. El 24 de Marzo de 1976 marcó un quiebre sustancial no sólo en la historia nacional, implicó una bisagra en la vida de millones de argentinos. El terrorismo estatal, que ya había comenzado a desarrollarse con la actividad desplegada por la Triple A, tomó dimensiones impensadas. La dictadura se aferró en nuestro territorio mediante el terror y la sangre. Su objetivo inmediato: la domesticación interna y el sometimiento económico nacional. Martínez de Hoz, a cargo del Ministerio de Economía, completaría el trabajo sucio.


Particularmente nuestra ciudad vivió con intensidad el terrorismo estatal, con editoriales y rotativas manchadas de sangre, con abanderados civiles del genocidio que todavía hoy caminan por las calles. El manto de impunidad esta siendo corrido. Desde el 28 de Junio de 2011 se están llevando a cabo las audiencias públicas del Juicio por Crímenes de Lesa Humanidad cometidos bajo control operacional del Comando V Cuerpo de Ejército.


En esta senda trazada hay nombres propios como los de Ernesto Malizia, Celia Korsunsky, Jorge Molina, y cientos de compañeros anónimos que coherentemente se han comprometido en mantener la memoria de los 30.000 compañeros y en la construcción de una sociedad más justa. De igual manera debe reconocerse la tarea fundamental desarrollada por Luis Alberto Cotter y Hugo Omar Cañón. Labor que hoy lleva a cabo ejemplarmente el Dr. Abel Córdoba.


De la misma forma que valoramos lo desarrollado en materia de Derechos Humanos por el gobierno de Raúl Alfonsín con la tarea de la CONADEP, el Nunca Más y el Juicio a las Juntas; reivindicamos la anulación de las leyes de impunidad llevada a cabo por Néstor Kirchner y la colocación de los Derechos Humanos como política estatal tanto en su administración como en la de Cristina Fernández. Desde la dictadura genocida los organismos de Derechos Humanos han mantenido en alto las banderas, Abuelas, Madres, Hijos y militantes de distintas extracciones político partidarias se enfrentaron a los intentos de institucionalizar la impunidad. Estaremos marchando por las calles de Bahía Blanca sabiendo que los culpables de tanto dolor y muerte están siendo juzgados.


Juicio y castigo a todos los culpables

Cárcel común a todos los genocidas

No nos olvidamos de Jorge Julio López

30.000 compañeros desaparecidos ¡Presentes!


GRUPO 83
en el Frente de Integración Ciudadana