Las patotas de Remus Tetu que le arrebataron la vida a Watu eran la mano de obra de quienes buscaban construir una Universidad adormecida en el marco de la misión Ivanissevich y alejada de cualquier tipo de compromiso político social que colocara en debate los cimientos de una sociedad injusta.
La Triple A constituyó así el prolegómeno de la dictadura genocida y los llamados cómplices civiles fueron engranajes fundamentales del terror desplegado tanto en Bahía Blanca como en el resto del país. Hoy con los juicios por crímenes de Lesa Humanidad encaminados y con genocidas presos, vemos la necesidad de avanzar en el total esclarecimiento del rol de la familia Massot y del diario La Nueva Provincia, soporte esencial de la dictadura.
Al homenajear a Davit “WATU” Cilleruelo a 39 años de su asesinato debemos renovar más que nunca el pedido de Justicia por su crimen.
La Triple A constituyó así el prolegómeno de la dictadura genocida y los llamados cómplices civiles fueron engranajes fundamentales del terror desplegado tanto en Bahía Blanca como en el resto del país. Hoy con los juicios por crímenes de Lesa Humanidad encaminados y con genocidas presos, vemos la necesidad de avanzar en el total esclarecimiento del rol de la familia Massot y del diario La Nueva Provincia, soporte esencial de la dictadura.
Al homenajear a Davit “WATU” Cilleruelo a 39 años de su asesinato debemos renovar más que nunca el pedido de Justicia por su crimen.
Juicio y castigo a todos los culpables
Cárcel común a todos los genocidas
No nos olvidamos de Jorge Julio López
30.000 compañeros desaparecidos ¡PRESENTES!
G83 Solidaridad + Igualidad
en Nuevo Encuentro