martes, 13 de julio de 2010

Los mismos derechos, con los mismos nombres

Porque el Estado argentino está obligado a no distinguir por su orientación sexual a las personas en el ejercicio de sus derechos, se deberían eliminar así las discriminaciones arbitrarias existentes.

Porque la figura legal del matrimonio es una institución jurídica y cultural, plausible de ser modificada ante los nuevos valores y conductas sociales en el marco de un Estado laico y plural.

Porque la diversidad sexual es un valor en sí mismo de las sociedades modernas y democráticas, que reconocen la pluralidad de orientaciones sexuales como elemento constitutivo del entramado social.

MATRIMONIO IGUALITARIO YA